Todo por el éxito (2ª parte)

 

Gastón, "La bella y la bestia"

Gastón, «La bella y la bestia»

Como norma general, los medicamentos son usados con la intención de obtener algún beneficio terapéutico que, teóricamente, ha de ser mayor que el riesgo inherente que su uso conlleva. Sin embargo, todos sabemos que la utilización de fármacos con objeto de conseguir fines diferentes a aquellos para los que fueron concebidos y que nada tienen que ver con la terapéutica es una práctica frecuente . En este post, continuando con la primera entrada dedicada a este tema, hablaremos de algunos medicamentos o productos, utilizados para aumentar el rendimiento deportivo y/o modificar algunos aspectos concretos de la apariencia física.

ESTIMULANTES DEL SISTEMA NERVIOSO CENTRAL

El objetivo en este caso es mejorar la alerta y el rendimiento psicomotor, reducir la fatiga y perder peso. Al estimular el SNC y el aparato cardiovascular, aumentan la producción de glucógeno y el metabolismo de los ácidos grasos. Las anfetaminas, la efedrina e incluso la cocaína han sido utilizadas por algunos deportistas con este fin.

Efectos sobre la salud: irritabilidad, insomnio, cefalea, mareos, ansiedad, vasoconstricción, taquicardia, y a altas dosis, HTA, palpitaciones, agitación y delirio. Su uso prolongado puede ocasionar  dependencia y efectos psiquiátricos graves (psicosis). Las anfetaminas han causado la muerte por arritmias y golpe de calor a atletas durante pruebas de resistencia. La cocaína puede provocar ictus, convulsiones y ataque cardíaco. Así mismo, la efedrina puede inducir cardiomiopatía y potenciar los efectos adversos de otras sustancias como los anabolizantes. También se han descrito síntomas gastrointestinales y trastornos psiquiátricos debido a su uso.

DIURÉTICOS Y AGENTES ENMASCARANTES

Se usan para bajar de peso y para disminuir la concentración en orina de las sustancias que se hayan podido utilizar. La acetazolamida se ha empleado también para reducir los efectos de la altitud sobre el rendimiento físico y para enmascarar la presencia en orina de estimulantes, ya que al alterar el PH de la orina favorece la reabsorción tubular de los mismos. Otros agentes enmascarantes son, por ejemplo, los inhibidores de la alfa reductasa como la finasterida y dutasterida y también los expansores de plasma ( usados para diluir la hemoglobina y disminuir el hematocrito aumentado artificialmente por eritropoyetina), entre ellos la albúmina, el dextrano o el hidroetilalmidón.

Efectos sobre la salud: hipopotasemia, hipotensión y trastornos electrolíticos, deshidratación, calambres y dificultades de termorregulación, hiperuricemia e hiperlipidemia.

B2 AGONISTAS Y CLEMBUTEROL

Tienen acción estimulante simpática global, ya que a dosis altas no sólo estimulan los receptores B2, sino también los B1 Y B3. Por otra parte, la administración continuada vía oral de salbutamol o clembuterol induce hipertrofia muscular, aumentando por tanto, la fuerza muscular. Este último tiene una prolongada duración de acción y, a dosis muy elevadas, efecto anabólico y lipolítico.

Efectos  sobre la salud: temblor, cefalea, taquicardia y trastornos electrolíticos, especialmente hipopotasemia.

ANTAGONISTAS ESTROGÉNICOS

Se utilizan para combatir los efectos secundarios de los esteroides, como la ginecomastia. Entre ellos:

  • Inhibidores de la aromatasa: anastrozol, exemestano y letrozol.
  • Moduladores selectivos de los receptores de estrógeno: raloxifeno tamoxifeno.
  • Otros antiestrógenos: clomifeno y fulvestrant.

BETABLOQUEANTES

Estos medicamentos pueden mejorar el rendimiento en deportes para los que se requiere pulso firme y coordinación motora, aliviando síntomas como el nerviosismo y el temblor.

Efectos sobre la salud: fatiga, letargia, bradicardia, hipotensión, impotencia y broncoespasmo.

OPIÓIDES

Se usan para entrenar por muy por encima del umbral del dolor o para controlar la ansiedad antes de una competición.

Efectos sobre la salud : efectos adversos psiquiátricos y dependencia.

SUPLEMENTOS DIETÉTICOS

Existe una amplia gama en el mercado a base de proteínas, aminoácidos, carbohidratos, vitaminas, minerales, plantas medicinales y extractos tisulares. Se registran como productos dietéticos o alimenticios, aunque algunos presentan en su composición sustancias no declaradas, incluyendo cantidades significativas de anabolizantes o testosterona, especialmente si se obtienen a través de internet. Muchos de ellos contienen creatina, una sustancia muy popular entre usuarios de gimnasios y deportistas. La creatina se sintetiza en hígado, riñón y páncreas y se almacena en el músculo esquelético. También se encuentra presente en carnes y pescados. Las células energéticas necesitan la creatina, en forma de fosfocreatina, que actúa como donante de fosfatos para generar ATP a partir de ADP. Como el ATP proporciona la energía necesaria para la contracción muscular, se ha argumentado que esta sustancia incrementaría la producción de energía, favoreciendo el crecimiento y la fuerza muscular, reduciendo así mismo, el tiempo de recuperación y aumentando la resistencia. De cualquier forma, sólo ha demostrado una pequeña mejora en el rendimiento deportivo para la realización de esfuerzos físicos de corta duración, repetitivos e intensos. En los deportistas con niveles adecuados de creatina no parecen obtenerse beneficios adicionales con aportes exógenos.

Efectos para la salud:

Los concentrados de aminoácidos y proteínas en grandes cantidades pueden provocar una pérdida excesiva de calcio por la orina, con el consiguiente riesgo de osteoporosis y lesiones en el riñón. Muchos de ellos contienen precursores de esteroides no declarados que se transforman en el organismo en esteroides con el riesgo potencial que estos conllevan y que ya comenté en el primer post dedicado al tema. Finalmente, la creatina puede provocar retención de líquidos, calambres y aumento de peso, dolor y tensión en extremidades inferiores. De forma menos frecuente, se han descrito: deshidratación, vómitos, diarrea, fatiga, erupciones cutáneas, ansiedad, nerviosismo, migraña, miopatía, polimiositis, insuficiencia renal y disnea.

En definitiva, existe un uso indiscriminado de productos para mejorar el rendimiento, la fuerza física y el aspecto corporal y un gran desconocimiento sobre los efectos adversos y sobre el riesgo asociado a su utilización, como es frecuente, a dosis elevadas y simultáneamente con otros medicamentos. Muchos se comercializan en el mercado negro sin que existan controles que aseguren la calidad del producto y suelen contener además, ingredientes no declarados. Otro riesgo potencial añadido es el derivado del intercambio de jeringuillas. La intervención en términos de educación sanitaria por parte del farmacéutico, como profesional sanitario más accesible, es esencial.

LISTADO DE MEDICAMENTOS CON SUSTANCIAS INCLUIDAS EN RESOLUCIÓN DOPAJE VIGENTE, 20 de diciembre del 2013

Fuentes de información:

«El dopaje en el deporte», www. Portalfarma.com

«Medicamentos y suplementos utilizados por deportistas», Boletín INFAC

«Peligros de algunos medicamentos empleados por deportistas», Boletín Terapéutico Andaluz

3 comentarios en “Todo por el éxito (2ª parte)

  1. Pingback: Todo por el éxito (1ª parte) | El blog de una boticaria en tránsito.
  2. Muy buena entrada! El bombo que ha tenido la suplementación dietética en este sentido ha sido excesiva teniendo en cuenta la evidencia de la que se dispone. Y aún hay gente muy convencida. Saludos!

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    • Así es, ocurre con muchos otros productos, cosmética, productos para adelgazar, etc. Compramos «ilusiones», pero el problema es cuando no sólo son caras, sino también peligrosas. Me alegra que te guste y muchas gracias por el comentario.

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